El Colegio Jesús-María ha sido parte esencial en la formación de mis tres hijas, quienes han tenido la bendición de recibir una educación de calidad e integral, enfocada en la línea del Más.
Para mí y mis hijas JM es nuestra familia, nuestro segundo hogar.
Es por esto que las palabras de agradecimiento a las religiosas, directivos, maestros y empleados, se quedan cortas, no solo por su empeño en la formación académica de nuestras niñas sino por los valores inculcados a lo largo de este hermoso proceso de formación.
La satisfacción es mayor al ver mis dos hijas egresadas del colegio en 2010 y 2014, y me llena el alma que mi tercera hija, siga formándose como una mujer íntegra y de fe en el colegio.
Sin duda, el colegio ha sido la mejor decisión para la educación de mis hijas, porque verdaderamente forma a mujeres en valores, con compromiso y empatía por el otro, lo cual se ve reglado en cada uno de sus logros, de la mano de Jesús y María y siguiendo las enseñanzas de Santa Claudina Thévenet.