Más que un colegio donde nuestra hija aprenderá muchas cosas, vemos al Jesús-María como la mejor opción para nuestra pequeña, por las siguientes razones:
– Ante todo vemos cómo le enseñan a ser una niña piadosa de Dios, una chiquita donde entregará al Señor cada actividad en su diario vivir, parte fundamental en la esencia de cada persona.
– El lugar donde aprende no solo lo académico, sino también de relaciones personales, donde se potencia el talento individual sin etiquetarlas y ayudándoles a crecer como personas y preparándose para saber enfrentar la vida con el éxito y derrotas del diario vivir.
– Consideramos que nuestro colegio es unos de los principales filtros donde ella adquirirá responsabilidades, el cumplir con todo, donde aprenderá a mejorar cada día, a ser aceptada y aceptar.